El programa Migres contabiliza casi 300.000 pájaros de varias especies que han cruzado este verano el Estrecho La presencia de especies de Europa Oriental, cada vez más frecuente
Y. G. T. tarifa | Actualizado 07.10.2013 - 08:15
La Fundación Migres ha finalizado la campaña de seguimiento de aves planeadoras y rapaces y en breve comenzará el seguimiento de aves marinas. Ambas están incluidas en el Programa Migres 2013 que concluye este mes de octubre. Los números son similares a los del año pasado, con casi 300.000 aves registradas en su paso por el Estrecho.
El coordinador del Programa Migres, Alejandro Onrubia, indicó ayer que del programa de este año surgen varias conclusiones. Así, se han observado especies de Europa Oriental como aguilucho papialbo y el aguilucho pomerama que no son frecuentes en esta zona. Se trata de dos especies que en los últimos años se detectan en la zona, con mayor presencia en cada campaña.
En cuanto a las especies que cada año atraviesan el Estrecho procedentes de África, se confirma el aumento tanto de cigüeñas como de aves rapaces.
"Las poblaciones se siguen recuperando. Algunas como el alimoche o el aguilucho están en peligro de extinción, sin embargo las políticas de conservación están dando buenos resultados", señala Alejandro Onrubia.
En estos programas específicos se encuentra el aguilucho fenicio. Aquí se realizan campañas de protección de nidos y en los campos de cereal se atrasa la recogida de la cosecha para evitar el paso de las máquinas, entre otras medidas.
Igualmente, se protege el alimoche, una especie sensible a la los venenos. Para ello, desde las administraciones se conciencia a la población rural y se establecen medidas de conservación. "En los últimos 30 años la tendencia es muy positiva y muchas aves rapaces se están recuperando", añade Onrubia.
La observación científica y la realización de conteos sistemáticos se ha realizado este año por profesionales ornitólogos al no existir el programa de voluntariado subvencionado cada verano por la Junta. Este año se ha realizado un programa de colaboración con estudiantes de países como Malta, Francia o Estados Unidos que reciben clases de formación.
"Hemos suplido con estas colaboraciones la falta de voluntarios. Ellos mismos se han pagado su alojamiento y manutención", añadió el coordinador del programa, quien añadió que los estudiantes han conocido el espectáculo de la migración, a pesar de los muchos días de viento de levante, que impiden realizar conteos exactos debido a que las aves no cruzan y realizan círculos durante todo el día. Por otra parte, señaló que se observa cada vez más la presencia de gente aficionada a la observación de aves. "El Estrecho es el destino ornitológico preferente de toda Europa, especialmente este año con la inestabilidad de países del Mediterráneo. Algunos días de agosto y septiembre había más de 300 personas en los observatorios", apunta.
Aún así, argumentó que existen carencias que impiden que este turismo sea mayor, como es la falta de dotación en los observatorios o el mal acceso existente. "Son asignaturas pendientes, sin embargo, cada año acuden entre 8.000 y 9.000 personas sólo a ver aves y son gente con un poder adquisitivo alto, por lo que supone un impulso económico importante", concluye.
EUROPASUR
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