Ayer por la mañanita tempranito nos fuimos a Guijuelo y hacia un frio 1ue "pelaba", asi que nos tomamos un cafelito y recorrimos sus bonitas calles y entramos en el Museo del jamón, donde se nos ilustró a la perfección desde que el cerdo está en la dehesa hasta que salen los productos elaborados. Muchos secretos que no conocemos se nos desvelaron sobre el jamón y las chacinas. Comproamos algo ( poquito) de chacina y tras tomar la cervecita de rigor con pestorejo, planchitas y una exquisita tortilla, regresamos a Baños de Montemayor, donde tras comer en el hotel nos fuimos al balneario para la piscina climatizada, el pasillo vascular,los parafangos cervicales, las estufas de vapor, los chorros de agua especial en la garganta y la cura de agua hidropínica. Todo un tratamiento para los que andamos un poco escacharrados como los vehiculos viejos.....
La belleza y el clima de esta comarca cacereña y salmantina, a la vez,
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