Hoy hemos vuelto a la Sierra del Arca (San Roque, Cádiz)
Sierra del Arca
En este mapa antiguo aparece como
Sierra del Arco
Esta vez, teníamos la intención de visitar
Cueva Horadada.
El día, soleado y sin brumas, permitió que disfrutáramos de excelentes vistas panorámicas desde lo más alto de las formaciones geológicas que cubren parte de los llamados Llanos de la Horadada.
Hay muchos abrigos y cuevas en los que la acción del viento y el agua han dejado su huella.
La zona ha sido asolada por el fuego. Quedan pocos árboles entre las rocas. Es de destacar un enorme lentisco y algún que otro quercus.
Pero el lugar presenta gran cantidad de plantas que brotan entre los restos calcinados de las aulagas.
Encontramos rápidamente la cueva que posee pinturas y grabados del paleolítico (desgraciadamente, también ha sufrido el ataque de los nuevos vándalos y alanos de la actualidad. Algunos ha dejado hasta su firma)
Aparece rodeada de espinosas aulagas
Cueva Horadada (San Roque)
Este abrigo alberga pinturas rupestres (H. Breuil, 1929) y grabados. También ha
servido de blanco para prácticas de tiro. Si no fuera por algunos desconchones naturales y los destrozos realizados por los impactos de balas, esta cueva tendría hoy seguramente la misma importancia que la Cueva del Moro de Tarifa. El tipo de grabados es muy similar a la técnica empleada en los grabados de grandes mamíferos de aquella cueva tarifeña.
Lothar Bergmann
EL ARTE RUPESTRE PALEOLÍTICO DEL EXTREMO SUR DE LA PENÍNSULA IBÉRICA
Lothar Bergmann / Consejero de Honor del IECG (†)
Antes de entrar, hicimos un recorrido a su alrededor.
Allium triquetrum L.
Parte superior del abrigo
Las pinturas de esta cueva fueron descubiertas por Dorothy Garrod y Harry Milton en 1926, y publicadas por Breuil y Burkitt en 1929. Sin embargo, el descubrimiento de los grabados no fue realizado hasta 1997 por el sanroqueño Jorge Antúnez Neira.
Las pinturas están en la parte izquierda del abrigo.
Al fondo, Algeciras y sus sierras.
Gibraltar asoma su morro
Genista tridentata en las paredes exteriores de la cueva.
Ombligo de Venus (Umbilicus), afectadas por la acción de algún insecto, y dos especies de
sedum que crecen en la entrada a la cueva. Las tres pertenecen a la familia de las
Crassulaceae
Los palmitos también han encontrado aquí su lugar
Después de un buen rato dentro del abrigo, nos dedicamos a recorrer el entorno. Un buen número de plantas empiezan a llenar de color el lugar.
Una fuente brota bajo una enorme roca.
Linaria spartea SCROPHULARIACEAE.
Costa de Estepona
Genista tridentata con sus curiosos tallos aplanados

Linus bienne
Polygala baetica POLYGALACEAE
El Hacho y el pueblo de Gaucín
Lavandula stoechas L. subsp. stoechas LABIATAE.
Las manchas blancas del fondo corresponden a
Casares
Scilla
Abundaban también estas
Lithodora prostrata subsp. lusitanica BORAGINACEAE.
No quedó ni un detalle sin fotografiar
Currini haciendo virguerías con su nueva cámara
Reseda ¿phyteuma L ? RESEDACEAE.
La Bahía de Algeciras
Sierra Bermeja
Thymelaea lanuginosa THYMELAEACEAE.
En primer término, Torreguadiaro
Ceuta y Gibraltar
Célula excursionista jimenata (Currini y Andarrios). Un buen día con buena compañía.